En este espacio quisiera abrir una reflexión sobre el rol
del sigilo como arma letal contra las personas. Hay entes, organizaciones,
grupos o individualidades que perjudican y dañan a la gente con técnicas de
manipulación que pueden incluso coquetear con el maltrato psicológico. Un
simple "tienes que cambiar eso", "es lo que hay que hacer",
"las cosas son así y punto", "para salir de la crisis económica
este es el único remedio".
En esta sociedad, emergen opiniones y recomendaciones acerca
de cómo llevar nuestras vidas y evolucionar. Es cierto que nos encontramos con
consejos repletos de buenas intenciones, pero por desgracia otros buscan el
beneficio propio antes que el de la persona a la que se trata de ayudar. El
sigilo es la vía. Simples comentarios aparentemente inocentes pueden traducirse
en manipulaciones que buscan un cambio con principios ajenos a quien los
recibe.
Cada persona es como quiere ser, la evolución es encontrarse
asimismo y vivir como cada uno quiera vivir, mejorando lo que cada uno quiera
mejorar y siempre intentándolo bajo sus ideas para crecer. La evolución no son
patrones estándares de comportamiento, son los patrones que cada uno quiera
seguir. La vida son distintos caminos y esa es la esencia del ser humano, la
riqueza de su diversidad.